El dogma es el siguiente: La verdad en política es la libertad política.
La episteme levantada sobre ese dogma es la Teoría Pura de la República Constitucional.
La dogmática y la epistemología no son como el agua y el aceite. En la península Europea se aplicó la episteme griega ( ¿ hay otra?) al logos cristiano. Dicen que a quien lo hizo, Santo Tomás, lo iban a quemar, pero se murió camino del juicio.
Sí, había dialécticos antes de la conceptualización de la idea de dialéctica por Hegel; como había soberanos antes de la conceptualización de la idea de soberanía por Bodino. La conceptualización es el delirio antipolítico de la modernidad. La sentina de donde brotan las alimañas antipolíticas.
Yo no creo que el fuego se contenga con palabras. Disculpen mi antimodernismo. Por si ni lo saben: Un antimoderno es quien quiere salvar a la modernidad de su propio delirio. Igual que el conservador salva al liberal del libertinaje. Igual que el liberal salva al conservador de la esclerosis múltiple.
Licurgo es la versión sapiencial de la bestial conceptualización del leviatán hobbesiano.
Me he desviado. La episteme acera y fortalece el dogma. Un dogmático no tiene que renunciar a lo epistemológico. No sé si en la China o en el Islam tienen que hacerlo. Desde luego que en España ,no.
Los españoles jamás, pero jamás de los jamases tenemos o debemos renunciar a racionalizar el dogma. Eso es traición a nuestra tradición.
La República Constitucional es dogmática robustecida por la epistemología. La Teoría Pura de la República Constitucional lo demuestra.
Aquí hay que señalar a los dos enemigos: Los dogmáticos que no precisan , o renuncian a la epistemología; y los epistemologorreicos cuyo dogma es que no existen los dogmas. Los dogmáticos antidogmáticos.
Ellos no se conformarán con pelearse entre sí. Nada de eso. Ellos ambicionan que no haya más pelea que la suya. Son Cástor y Pólux. Hermanos ya en pelea intrauterina.
Tan blasfemo es para los unos someter su creenciaba la razón; como barbárico es para los otros emplear la razón rigurosa en asuntos de creencias